Miguel es el Arcángel de mayor importancia entre todos los ángeles y, además, se encuentra entre los siete arcángeles. Por lo general este arcángel suele llevar una espada, y es la que hace uso para liberarnos de todos los males. El Arcángel Miguel es una representación de la fuerza y dispone del poder para hacer frente a las batallas más complicadas.
Simbolismos y signos del Arcángel Miguel
El Arcángel Miguel es el jefe del ejército celestial en las religiones cristiana, islámica y judía.
De acuerdo con la Biblia, el Arcángel Miguel tocará la trompeta el día del juicio final. Su nombre es mencionado en diversas ocasiones en el Antiguo Testamento y en el Nuevo Testamento.
Quizá en algún momento de tu vida llegues a sentir miedo por algún ser querido e incluso por ti, por ello te recomendamos hacer una llamada al Arcángel Miguel para que te ayude.
Es tal que así: «Amado Arcángel Miguel, cúbreme con el rayo azul de tu espada de luz, te lo voy a agradecer, oh, amoroso Arcángel Miguel.»
Si haces esto confiando en la fe, vas a notar que una gran tranquilidad se apodera de ti. Podemos hacer una invocación haciendo uso de una vela.
Si observamos el tarot de los Ángeles, nos damos cuenta que el Arcángel Zadquiel nos expresa sobre la limpieza del karma y del olvido sobre aquellos errores que se han cometido en el pasado.
La persona que consulta se debe sentir libre para poder reconstruir su vida y comenzar desde cero. Nos encontramos ante el Ángel de la verdad, de la misericordia y de la anunciación. Es el ángel que está cerca del hombre y siempre a la izquierda de Dios.
Nos encontramos ante el arcángel del amor, la naturaleza, las aspiraciones y la esperanza. Se le tiene en consideración como el príncipe de los Ángeles. Es el que se ocupa de las relaciones con los demás Ángeles.
San Miguel se muestra victorioso ante su lucha contra el diablo, en lo que respecta a la iconografía cotidiana, en la escena cae a sus pies ante la espada del ángel. De esa manera, se nos muestra el bien por encima del mal.
El símbolo del Arcángel Miguel es un signo de gran protección. El sello funciona como limpiador del canal de luz de nuestro ser.
Con su espada nos entrega fuerza. Este sello nos proporciona energía celestial y las buenas vibraciones del Arcángel. Purifica y nos da protección sobre todos los lugares físicos.
Por medio del sello, limpiamos y liberamos las malas vibraciones para poder sanar el espíritu y transmutamos todos los recuerdos del alma.
El Arcángel nos viene a recordar la Santísima Trinidad. Nos hace un recordatorio de que somos los hijos de Dios y que nuestro lugar es anclar la luz en la tierra. Nos entrega fe y confianza en el Universo y en Dios.
El Arcángel tiene la correspondencia con el código sagrado número 613. Su mineral tiene una asociación con la sodalita.
Estamos ante un material, la sodalita, que hace estímulo del tercer ojo, por lo que tiene una gran utilidad a la hora de meditar y armonizar la energía que vibra en el cuerpo.
La asociación del Arcángel Migue, viene asociado al chakra de la garganta. Estamos ante un chakra que es el centro de la voluntad, la integridad, la comunicación y la confianza. En el nivel físico tiene la capacidad de regir la tiroides, el cuello y la garganta.
Para hacer una invocación de este chakra, es conveniente hacer uso de una vela azul para la justicia y la roja para la fuerza. Encuentra un lugar donde te encuentres en calma y sin hacer interrupciones para realizar esta meditación.
Siéntate de manera cómoda con la espalda recta, mantén los pies apoyados en el suelo y enciende algo de incienso. Si sientes comodidad puedes llegar a cerrar los ojos.
Respira de forma profunda y siente tu cuerpo y espíritu relajándose. Luego, desde lo más profundo de tu ser, haz una petición al Arcángel Miguel de que te acoja con su luz y siente cómo te rodea su poder.
Intenta imaginar un círculo de luz de color azul que te protege. Respira de forma suave y siente la protección del cielo en ti.
La luz entra en cada parte de tu ser al respirar. Siente esa luz como viniendo desde el mismo cielo. Ese rayo de luz atraviesa tu pecho. ¡Tienes que sentirlo!.
Habrá una conexión desde tu corazón, con lo esperado y con aquellos sentimientos más profundos como la compasión y el perdón. Siente cómo tu corazón se expande.
Haz una petición al Arcángel Miguel para que te entregue toda la protección y la divina luz.
Luego de este tiempo, recupera tu estado despierto de conciencia. De manera profunda respira tres veces y siente esa fuerza de volver al presente. Con esta meditación renovarás tus energías y pedirás la ayuda divina.
