TEMERITAS SIT FLORENTIS AETATIS, PRUDENTIA SENESCENTIS.
La temeridad es propia de la juventud, la prudencia de la vejez.
(Cicerón, De senectute, 20)
Invitación a la prudencia en las decisiones y acciones en nuestro día a día.
TEMERITAS SIT FLORENTIS AETATIS, PRUDENTIA SENESCENTIS.
La temeridad es propia de la juventud, la prudencia de la vejez.
(Cicerón, De senectute, 20)
Invitación a la prudencia en las decisiones y acciones en nuestro día a día.